Un operativo en la carretera Potosí-Tarija y en predios de cooperativas mineras detectó la presencia de siete adolescentes trasladados por empresas cooperativistas para realizar actividades de minería. La Defensoría del Pueblo confirmó que los menores fueron entregados a las Defensorías de la Niñez y Adolescencia (DNA) del Gobierno Autónomo Municipal de Potosí para su protección.
En el operativo participó la Delegación Defensorial Departamental de Potosí, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), el Ministerio Público, la Jefatura Departamental de Trabajo y la DNA local. Las autoridades concentraron la intervención en el Retén Plahipo, un punto estratégico de tránsito hacia centros mineros, además de inspeccionar cuatro cooperativas en la zona.
Franklin Sunagua, representante de la Defensoría, señaló que el trabajo infantil en minería vulnera derechos fundamentales y pone en riesgo la integridad física y emocional de niñas, niños y adolescentes. Los menores hallados quedaron bajo custodia institucional para iniciar el proceso de restitución familiar.
Durante la inspección, las autoridades también verificaron condiciones precarias de seguridad en varias cooperativas, incluida la ausencia de equipamiento básico de protección para los trabajadores. En dos de estas unidades recientemente se reportaron accidentes fatales. Según datos de la FELCC, ya se registraron 56 fallecimientos en minas potosinas en lo que va del año.
La Defensoría recordó que el trabajo en minería está prohibido para menores de edad por tratarse de una actividad peligrosa. La Ley Nº 548 (Código Niña, Niño y Adolescente) establece los límites legales para el empleo de menores, bajo estrictas condiciones y autorizaciones.


