El departamento de La Paz, bajo la dirección del Servicio Departamental de Salud (Sedes), asumió un papel protagónico en la lucha contra el sarampión, implementando políticas públicas y actividades sanitarias previas a la emergencia sanitaria nacional. Javier Mamani Acarapi, jefe de Epidemiología del Sedes, destacó la articulación efectiva entre municipios, colegios médicos, cajas de salud y unidades educativas para responder al brote.
Desde el 23 de junio hasta el 4 de julio, se lleva a cabo una campaña masiva de vacunación en los 87 municipios y más de 970 comunidades del departamento. Más de 6.000 trabajadores de salud, organizados en brigadas, están movilizados para aplicar las vacunas SRP, cubriendo tanto áreas urbanas como rurales. En El Alto, operan 155 brigadas, mientras que otras 80 se encuentran desplegadas en todo el departamento.
El cerco epidemiológico activado en torno a los dos casos confirmados en La Paz (un adolescente de 16 años y una bebé de nueve meses) incluyó la búsqueda activa de posibles contagios y vacunación masiva en un radio de siete cuadras. Según Mamani, estas medidas han sido cruciales para evitar una propagación mayor.


