La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) informó que los bloqueos de carreteras liderados por sectores afines a Evo Morales, entre el 2 y el 15 de junio, generaron pérdidas económicas superiores a los $us 1.500 millones.
El presidente de la CEPB, Rolando Kempff, explicó que estas medidas de presión afectaron gravemente la economía nacional y calificó los bloqueos como “un gran problema recurrente en Bolivia”. Kempff instó a respetar la Constitución Política del Estado (CPE), que garantiza el derecho al libre tránsito, y expresó la esperanza de que el país pueda recuperar la estabilidad para continuar desarrollándose.
“Los empresarios siempre nos levantamos después de las adversidades. Sin embargo, necesitamos tranquilidad para seguir trabajando y construyendo el futuro del país”, declaró Kempff.
Los bloqueos, concentrados principalmente en Cochabamba, se realizaron para exigir la habilitación de Evo Morales como candidato presidencial en las elecciones de agosto, a pesar de que enfrenta restricciones legales, no cuenta con un partido político habilitado y ha vencido el plazo de inscripción de postulantes.
La medida fue suspendida el 15 de junio tras enfrentamientos violentos en Llallagua, Potosí, durante operativos de desbloqueo. Sin embargo, el “Pacto de Unidad”, liderado por sectores afines a Morales, advirtió con retomar acciones de presión en las ciudades si no se atienden sus demandas.
Los empresarios han reiterado la necesidad de priorizar el diálogo y el respeto a la legalidad para evitar mayores perjuicios a la economía y al desarrollo del país.


