Mariana Prado, candidata a la Vicepresidencia por la alianza Alianza Popular, denunció este martes que es víctima de acoso político y violencia digital por su condición de mujer. Afirmó que, a pesar del hostigamiento, continuará en la carrera electoral: “No me van a doblegar, eso que lo sepan”.
“Hay momentos que abro las redes y quiero llorar”, confesó Prado, quien lamentó que los comentarios que recibe no se centran en sus propuestas, sino en su apariencia o en detalles personales. “Trato de engrosar la piel, pero me duele mucho”, dijo conmovida, señalando que los ataques también afectan a su familia.
La exministra de Planificación mencionó que su caso fue reconocido como acoso político por la Coordinadora de la Mujer, entidad que documentó al menos cinco casos similares en el actual proceso electoral. El observatorio incluyó en su informe a Eva Copa, Susana Bejarano, Toribia Lero, Karla Robledo y la propia Prado.
“Esto no solo viene de afuera, también de adentro de la alianza”, denunció la candidata, en alusión a críticas internas que ha recibido dentro de su bloque político. Entre los calificativos más recurrentes mencionó “jailona” o “izquierdista de café”, términos que considera ofensivos y cargados de misoginia. “Tocan una vena muy sensible en mí”, señaló.
Tania Sánchez, directora de la Coordinadora de la Mujer, advirtió que este tipo de violencia busca desalentar la participación política de las mujeres. “Son intentos por excluir a las mujeres del ejercicio pleno de sus derechos políticos”, sostuvo.
Prado indicó que está evaluando acciones legales para sentar un precedente y proteger a futuras candidatas. “No debería ser tan hostil ni traumático participar en política”, expresó.
Finalmente, defendió su compromiso con los sectores populares y alertó sobre el avance de una “ola conservadora” que, a su juicio, pone en riesgo los derechos ganados. “Estamos en una encrucijada. Hay que poner el pecho”, afirmó con firmeza.


