Durante la segunda vuelta electoral del 19 de octubre, la Policía Boliviana detuvo a 221 personas con órdenes de aprehensión, aprovechando su presencia en los recintos de votación. De ese total, al menos 172 fueron encarceladas por incumplir el pago de asistencia familiar, según informó la Dirección General de Régimen Penitenciario.
El director Juan Carlos Limpias explicó que las detenciones fueron posibles gracias al cruce de datos entre el sistema judicial y el padrón electoral. Muchos de los aprehendidos ya habían emitido su voto cuando fueron identificados por los agentes. El resto de los detenidos enfrentaba cargos por delitos menores.
La operación fue coordinada con operadores de justicia en todo el país y se ejecutó de forma simultánea en distintos centros de sufragio. Limpias destacó que el incumplimiento de asistencia familiar continúa siendo uno de los delitos más recurrentes, y que este tipo de acciones buscan garantizar el cumplimiento de las obligaciones legales.


