Los bloqueos de carreteras de esta última semana en Bolivia responden a los intereses personales del expresidente Evo Morales y ponen en evidencia el debilitamiento y la desinstitucionalización del Gobierno de Luis Arce, coincidieron analistas políticos.
Hasta el viernes pasado se registraron 15 puntos de bloqueo, la mayoría en las carreteras troncales hacia occidente y oriente (las vías antigua y nueva a Santa Cruz).
Los afines a Morales demandan su reconocimiento como candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS) en las elecciones generales de 2025 y la anulación de los procesos penales en su contra, entre ellos uno por estupro y trata de personas.
Demandas artificiales
Para la politóloga María Teresa Zegada, las otras demandas relacionadas con el alza de la canasta familiar, la falta de dólares y escasez de combustible “son artificiales porque el tema de fondo es el beneficio de Morales ya sea como candidato presidencial o para evadir la justicia”.
Zegada calificó de ilegítimo e injustificable el perjuicio a todo el país por intereses particulares; por lo tanto, Morales debe buscar una alternativa al interior de su partido para resolver sus conflictos políticos; si bien no prosperó su congreso, podrían realizar primarias internas. “Crece la indignación porque detrás de las medidas de presión hay denuncias de estupro contra Morales que quiere eludir y que sólo lo benefician a él y ni siquiera al MAS”, sostuvo.