La diputada chilena María Luisa Cordero volvió a estar en el centro de la polémica tras declarar que los bolivianos padecen de encefalopatía hipóxica, una condición que implica falta de oxígeno en el cerebro. Sus declaraciones surgieron en el contexto de la propuesta del político boliviano Rodrigo Paz sobre la legalización de vehículos indocumentados, conocidos como “autos chutos”.
Cordero afirmó que los bolivianos, por haber nacido en el altiplano, presentan una disminución crónica de oxígeno cerebral, lo que —según ella— afecta su capacidad cognitiva. Aseguró que esta condición fue descrita por investigadores estadounidenses que visitaron Bolivia, aunque no presentó evidencia científica que respalde sus afirmaciones. El tono de sus declaraciones ha sido calificado como ofensivo y discriminatorio por diversos sectores.
No es la primera vez que la diputada genera controversia con sus comentarios. En el pasado, ha sido criticada por emitir juicios despectivos sobre distintos grupos sociales. Esta nueva intervención ha provocado reacciones de rechazo en Bolivia, donde autoridades y ciudadanos exigen respeto y una retractación pública por parte de la legisladora chilena.


