En los últimos años, Bolivia enfrenta un marcado retroceso en sus exportaciones, una tendencia preocupante que evidencia tanto la falta de competitividad en los mercados internacionales como los desafíos estructurales y económicos que enfrenta el país.
Con una economía fuertemente dependiente de los recursos naturales, especialmente del sector minero, y una oferta exportadora poco diversificada, el país atraviesa una situación crítica.
Las estadísticas de comercio exterior revelan que, a agosto de 2024, las exportaciones bolivianas disminuyeron un 38% respecto al mismo periodo del año anterior. Este panorama refuerza la necesidad urgente de fortalecer la competitividad exportadora, un desafío que requiere abordar factores económicos, logísticos, políticos y sociales que afectan directamente la capacidad de Bolivia para competir en el mercado global.
Para comprender la situación y explorar posibles soluciones, Los Tiempos consultó a Danilo Velasco, presidente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb); Juan Pablo Demeure, presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), y Víctor Hugo Villarroel, gerente general de la Cámara Departamental de Exportadores de Cochabamba (Cadexco).