“El MAS ha puesto a Bolivia en uno de los peores momentos de su historia”, señaló el gobernador cruceño Luis Fernando Camacho, que planteó tres premisas para que la oposición y aquellos que no comulgan con el partido de Gobierno puedan cumplir con el objetivo de darle un cambio de dirección al país, gobernado desde 2006 por el Movimiento Al Socialismo (MAS) con una pausa en 2020 por la crisis de 2019.
La autoridad, que guarda reclusión en el penal de Chonchocoro desde 2022, denunció que los bolivianos están atrapados en una crisis económica que azota a los hogares y que mantiene a la población haciendo “filas interminables por combustible y que pronto nos tendrá haciendo colas por los alimentos”.
Esta situación -según su versión- es a la que nos llevó el MAS, “la realidad en la que nos tienen Luis Arce y Evo Morales; los dos son lo mismo, los dos son los culpables de la corrupción, la pobreza y la crisis en la que está sumido el país”.