Una niña de cuatro años permanece hospitalizada en el Hospital del Niño en Cochabamba tras haber sido picada por una araña de rincón. El médico pediatra Pablo Dávila informó este jueves que su estado es grave debido a “loxoscelismo cutáneo‑visceral, cuadro tóxico producido por el veneno de la araña del rincón, con afectación de órganos internos, lo que implica una situación seria y grave. Hay compromiso renal que ha derivado en una insuficiencia renal aguda, y la niña lleva más de una semana hospitalizada, en estado muy delicado y con pronóstico reservado”.
La menor, residente de la zona de La Maica, fue mordida mientras jugaba en el patio de su hogar. La picadura ocurrió en la parte posterior del hombro, una zona especialmente propensa a desarrollar loxoscelismo con daño renal. “La picadura fue en la parte posterior del hombro. Justamente, las mordeduras en el tronco son las más propensas a desarrollar loxoscelismo cutáneo‑visceral con afectación renal”, explicó el médico.
La niña ya recibió el antídoto correspondiente, está sometida a sesiones de diálisis debido a la insuficiencia renal y recibió transfusiones por anemia severa. La araña de rincón o Loxosceles laeta se distingue por su abdomen abultado y tono café oscuro que se aclara hacia las patas. Su picadura puede provocar desde lesiones en la piel hasta daño en órganos internos.
Estos arácnidos suelen esconderse en lugares oscuros y poco ventilados —debajo de muebles, detrás de cuadros, entre piedras o zócalos, y en áreas con baja higiene—, por lo que se recomienda mantener la limpieza del hogar y vigilar especialmente a los niños menores de 10 años.


