La sesión fue convocada para las 16:00 con el fin de debatir el préstamo para el “Parque Lineal” en La Paz y El Alto. El Gobierno espera que también se apruebe el crédito japonés destinado a diésel, gasolina y el voto en el exterior.
La Asamblea Legislativa Plurinacional retomará este miércoles el tratamiento de importantes créditos internacionales. En la mesa están dos contratos clave: un préstamo de $us 30 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para financiar el “Programa de Integración Urbana: Parque Lineal para La Paz y El Alto” y un crédito de $us 100 millones del Gobierno de Japón, destinado a la compra de combustible y garantizar el voto boliviano en el exterior.
La sesión, convocada por la Vicepresidencia del Estado, está prevista para las 16:00. La convocatoria recuerda a los asambleístas que deben priorizar su participación, luego de que ausencias anteriores impidieran la reinstalación de la sesión antes del receso legislativo.
Según el senador Guillermo Seoane, de Comunidad Ciudadana (CC), hay un consenso para aprobar el crédito del BID, y también se incluiría el préstamo japonés, que busca apoyar áreas sensibles como el abastecimiento de diésel y gasolina, además del desarrollo electoral en el exterior.
El ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, insistió en la urgencia de estos recursos. “Son 100 millones de dólares con una tasa prácticamente del 0%, lo cual es muy beneficioso para la economía boliviana”, declaró a Bolivia Tv.
El Ejecutivo ve en estos préstamos una vía para paliar la crisis de abastecimiento y asegurar la organización de las elecciones generales del 17 de agosto.
La anterior sesión del pleno, el 2 de julio, terminó suspendida en medio de acusaciones de irregularidades en la votación electrónica. Desde entonces, más de 15 créditos siguen a la espera de tratamiento, por un valor total superior a los $us 1.500 millones, según Cusicanqui.
El oficialismo espera que este miércoles se desbloquee el tratamiento de estos recursos, considerados fundamentales en un contexto de escasez de combustible, falta de liquidez y creciente tensión política.
