El representante del Transporte Internacional, Erland Melgar, expresó su preocupación por el agravamiento de la escasez de combustibles en el país, y aseguró que la situación ha llegado a niveles críticos. “Estamos realmente allá abajo, en el hueco”, advirtió al referirse al impacto en el sector.
Según Melgar, los problemas comenzaron a intensificarse desde septiembre del año pasado. Desde entonces, los transportistas han tenido que hacer filas de hasta ocho días para conseguir diésel, especialmente en zonas rurales. “Esto empezó con colas de dos días y fue empeorando. Hoy, en algunas regiones, podemos estar hasta una semana esperando combustible”, relató.
Criticó al Gobierno por su falta de respuesta efectiva. “Habrá que preguntarle al Gobierno, a YPFB, al ministro, por qué han sido tan obtusos. Incluso el presidente Luis Arce reconoció hace unos 15 días que no hay condiciones para cubrir la demanda, incluso si llegan los créditos”, afirmó.
Melgar también cuestionó el decreto que habilita la importación privada de combustibles, asegurando que impone más trabas que soluciones. “Tiene como 20 requisitos y no facilita nada. El sector privado no está en condiciones de asumir ese rol”, dijo.
La escasez de carburantes afecta directamente a la cadena productiva, advirtió. “Nos preocupa el sector primario, el que produce los alimentos. Si no hay diésel, no pueden sembrar ni cosechar. Y nosotros no podemos transportar. Todo termina afectando al consumidor”, explicó.
Para el dirigente, el origen de esta crisis está relacionado con la escasez de dólares, que —según apuntó— comenzó en febrero de 2023. Atribuyó la responsabilidad directa al Gobierno de Luis Arce y lo acusó de no tomar decisiones estructurales para resolver el problema.
“La clase política, y en este caso el Gobierno, debe dirigir el país con soluciones. Lamentablemente, no lo está haciendo. Lo advertimos y hoy vivimos las consecuencias”, concluyó.
