La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, abogó este martes para que prime el diálogo y no se concrete el bloqueo de caminos, desde el lunes 4 de septiembre, anunciado por una facción campesina que reclama para sí la dirigencia de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB)
“Nosotros entendemos y confiamos en que siempre debe primar el diálogo y apostamos por ello. Hemos escuchado el pronunciamiento de muchos sectores rechazando (el bloqueo) precisamente por la afectación. Esperamos que la vía (de solución) sea el diálogo ante todo”, reflexionó.
Una facción de la CSUTCB, dirigida por Ponciano Santos, llamó al bloqueo a partir del 4 de septiembre en rechazo a la dirigencia de Lucio Quispe, quien fue elegida y posesionada en el congreso que tuvo como sede el coliseo «Héroes de Octubre» de El Alto.
Al igual que el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, la viceministra alertó que de concretarse el anunciado paro generará un daño económico de $us 115 millones por día.
“El perjuicio es para la población boliviana. Sabemos que no es la vía, como lo habíamos señalado, ¿por qué? porque los afectados son el transportista, el que se afecta es el comerciante, el gremial, el empresario, el microempresario, son las personas que tienen que generar ingresos”, argumentó.
Como ejemplo del perjuicio que provocan los bloqueos, Alcón aludió al paro de 36 días en Santa Cruz, entre octubre y noviembre de 2022, que generó pérdidas millonarias a diferentes sectores.
Varios sectores sociales rechazaron el anunciado bloqueo de caminos e incluso, algunos, advirtieron con impedir que se obstaculice el libre tránsito.
La secretaria general de la Federación de Mujeres Trabajadoras Bartolinas Sisa de Tarija, Bertha Aramayo, instó a los “compañeros de la CSUTCB a sentarse en una mesa” y encontrar una solución a sus diferencias.