Bolivia y Brasil visualizan inversiones conjuntas, a través de YPFB y Petrobras, para la construcción de la segunda planta de amoniaco y urea, que demandará un costo de $us 2.500 millones – cuya locación se fijó en Puerto Quijarro, población fronteriza entre ambos países– y tendrá una capacidad de 4.200 toneladas (t); es decir, el doble de producción del complejo petroquímico de Bulo Bulo.
El vicepresidente nacional de Operaciones de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, Luciano Montellano, informó este miércoles que hay interés de ambas partes en concretar una inversión compartida en la perspectiva de ejecutar la segunda factoría.
“En el caso de la planta de urea se trata de una inversión muy grande, masiva, preliminarmente estamos hablando de un valor estimado de 2.500 millones de dólares en el que, a través de una sociedad, seguramente se va a llegar a que ambas partes aporten parte del financiamiento”, indicó
