Desde el inicio de las clases hasta la fecha -hace más de un mes- el Gobierno no aplica el diagnóstico previsto para el sistema educativo y el nivel de formación de los escolares está en el limbo.“Lamentable, todavía no se cuenta con el diagnóstico que se debía realizar al sistema educativo”, explicó a Página Siete el secretario ejecutivo de la Confederación Nacional de Maestros Urbanos, Vladimir Laura.El dirigente explicó que este diagnóstico se debía ejecutar en las dos primeras semanas después del inicio de las labores escolares de la gestión. “Ése era el compromiso”, indicó Laura.De acuerdo con la autoridad, el diagnóstico se elaboró en tres oportunidades, pero en todas quedó anulado. “Se hizo ese diagnóstico para saber sobre la deserción escolar y para conocer si los niños tienen acceso a internet; además, para conocer en qué condiciones los estudiantes están volviendo a clases, ya que el año pasado se realizó en julio la clausura de la gestión escolar”, dijo Laura. El año 2020 se generó una gran brecha en la educación. “Ya no es uniforme en todo el país”, sostuvo el representante del sector.Laura lamentó que el Gobierno no se encargue del diagnóstico, que es una medida importante para conocer sobre el nivel de formación de los estudiantes. Explicó que con este plan de evaluación se podrá verificar cuánto de retraso generó el cierre de la gestión 2020 y cómo se puede mejorar.El representante del sector aseguró que ahora aparentemente esa evaluación se realizará cuando se aplique la institucionalidad de los cargos de los directores. “Estamos esperando los cambios. Supongo que después nos informarán sobre la nueva evaluación que hagamos. Lo lamentable es que durante este tiempo realizamos un diagnóstico en vano. Es insulso nuestro trabajo”, explicó el maestro. De acuerdo con el presidente de la Junta Nacional de Padres de Familia, Pablo Diez de Medina, este tema es muy importante y que el diagnóstico se debería realizar desde el principio de las clases y en la primera semana.“Existe un retraso en la enseñanza de nuestros hijos y no podemos permitirlo. ¿Cómo saldrán nuestros bachilleres?”, indicó Diez de Medina. Laura explicó además que ya el año pasado los bachilleres registraron problemas “catastróficos” para el ingreso a las universidades y centros técnicos. “No queremos que pase lo mismo con todos los estudiantes de esta gestión. Lo que veremos a futuro es el retraso en la formación de los escolares”, añadió.Ya el año pasado, Página Siete informó que el 60% (24.000) de los bachilleres que estudian en el área rural no podían acceder a los cursos de nivelación porque en esas poblaciones no llega el sistema de internet. Otro factor importante fue el económico porque muchos estudiantes no tienen dinero para comprar megas y acceder a los cursos virtuales, de acuerdo con el secretario ejecutivo de la Confederación de Maestros Rurales de Bolivia, Andrés Huayta.De acuerdo con Laura, los maestros y los padres de familia buscan que este escenario no se repita, en especial porque los estudiantes deben continuar con sus estudios en las modalidades a distancia, semipresencial y presencial debido a la pandemia del coronavirus. La presidenta de la Asociación Nacional de Colegios Privados, Isabel Sotez, explicó que el nivel de formación en los colegios privados “no registró una bajada”. “El servicio es el mismo. Por eso, los padres de familia deciden inscribir a sus hijos en las unidades educativas privadas”, aseguró la representante.Un mes de clasesEvaluación Las labores escolares se iniciaron hace un mes y tres días en el país y hasta el momento en la mayoría de las unidades educativas no se entregaron los textos pedagógicos para el avance curricular. Además, maestros y estudiantes reportaron fallas persistentes en las plataformas digitales. Los padres de familia ven este tiempo destinado a las clases como un mes perdido.Postura El presidente de la Junta Nacional de Padres de Familia, Pablo Diez de Medina, aseguró que febrero fue “un mes perdido por falta de vocación y voluntad de las autoridades de educación”. Denunció que hasta la fecha hay estudiantes de varios colegios del país que no recibieron los textos.
FUENTE: PÁGINA SIETE