El viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Jaime Mamani, advirtió que el límite entre los departamentos de Cochabamba y Beni se ha convertido en una “zona roja” del narcotráfico debido a su difícil acceso y la presencia de organizaciones criminales que aprovechan las condiciones geográficas para operar con mayor libertad.
Según la autoridad, en esa región limítrofe, próxima al Trópico de Cochabamba, las fuerzas antidroga han logrado secuestrar aeronaves, desmantelar laboratorios de cristalización de clorhidrato de cocaína, fábricas de pasta base y destruir pistas clandestinas utilizadas para el tráfico aéreo de sustancias ilícitas. “Las organizaciones criminales buscan lugares sin caminos vecinales, zonas remotas donde puedan operar con menor riesgo”, explicó Mamani en entrevista con el programa Noches Sin Tregua.
El viceministro anunció que se ha intensificado el patrullaje aéreo y reveló que Brasil y Paraguay figuran como los principales mercados de destino para la droga que sale de Bolivia.
Solo entre el 9 y el 19 de julio, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) ejecutó seis operativos exitosos que derivaron en el secuestro de dos avionetas, 1,9 toneladas de droga (entre clorhidrato de cocaína, pasta base y marihuana), así como 10.000 litros de diésel, 960 litros de gasolina de aviación (AV GAS), cinco vehículos, tres armas de fuego y tres predios rurales. Además, se logró la aprehensión de nueve personas vinculadas a estas actividades ilícitas, con un impacto económico estimado en casi cinco millones de dólares para las redes del narcotráfico.
