El equipo del presidente electo Rodrigo Paz afirmó que garantizará el abastecimiento de gasolina y diésel desde el 8 de noviembre. Álvaro Ríos, exministro de Hidrocarburos, considera factible comprar el combustible al “fiado” porque la población no tolera 30 días más de desabastecimiento y filas. Según dijo a Visión 360, “lo primero que espera la población el 9 de noviembre es que el mercado esté abastecido. Eso es vital. Luego, más adelante, el Gobierno electo deberá resolver el tipo de cambio. Es razonable que se pueda comprar gasolina y diésel, fiado, te compro ahora y te pago después”.
Ríos advirtió que, si continúa el desabastecimiento y las filas por 30 días, el nuevo Gobierno enfrentará graves problemas. “Ellos seguro han tomado el problema en serio y están viendo pagos diferidos, compro ahora y te pago después con alguna garantía que seguro están mecanizando. La población está desesperada, no aguanta más”, alertó. Además, explicó que el país seguirá parcialmente desabastecido hasta el cambio de Gobierno, causando daño económico y angustia, porque muchos conductores no pueden movilizarse ni llegar a sus casas, situación que calificó de desastre generado por el MAS.
El exministro señaló que el equipo gubernamental entrante debería coordinar con los ejecutivos de YPFB para conocer el stock y ubicación del combustible disponible, a fin de normalizar el suministro a partir del 9 de noviembre, especialmente en zonas alejadas donde falta Gas Licuado de Petróleo (GLP) o llega con poca frecuencia.
Finalmente, criticó la irresponsabilidad del gobierno de Luis Arce por no haber previsto la crisis hace más de tres años, cuando se les advirtió sobre el riesgo del desabastecimiento por la falta de dólares. Según Ríos, se negaron los primeros indicios, culpando a factores externos como bloqueos o sobredemanda, mientras el verdadero problema es la falta de divisas. Indicó que YPFB no dispone de dólares y que el Banco Central ha tenido que vender oro por adelantado.
Por su parte, Gabriel Espinoza, jefe del equipo económico del PDC, explicó que la provisión se garantizará mediante acuerdos de ventas anticipadas con pagos diferidos, lo cual aliviará el flujo económico en importaciones por un monto estimado en 750 millones de dólares. “No se pagará todo el combustible contratado en los primeros tres a seis meses de una sola vez; hay un proceso de pago en cuotas. Eso es lo que aliviará el flujo, porque el gran problema actual es que hay más gastos que ingresos y se está tratando de ordenar”, concluyó.
